Alas

El año viejo es el recuento de un pasado vivido aún entre nuestras manos que queremos que acabe por muchos motivos, quizás ese sea uno de las razones de celebrar con alegría lo que termina y recibir un comienzo lleno de proyectos, metas y buenos deseos. Para algunos es celebrar la vida, dejar atrás lo que no resultó y estar listos para un nuevo comienzo esperanzador y expectante. Para otros, es solo despertar un día cualquiera donde el calendario comienza un nuevo ciclo.  Proyectarse es un buen comienzo, revisar todo lo que te propusiste hacer durante el año que termina y definir tus nuevas metas, es una manera de reestructurar nuestras acciones. Escribir tus objetivos e invitar a la familia a que lo haga, es una forma de trabajar juntos en el logro de las metas. Además de definir claramente hacia dónde te diriges y que cosas quieres realmente lograr, y cómo puedes contribuir en el logro de los objetivos de los demás en casa. Aprovecha la buena vibra y los buenos deseos...

Maestro, y al final de cuentas ¿qué es vivir?   Hijo, vivir es caminar. ¿Y si por alguna razón no puedes hacerlo? Entonces, el vivir es mirar como los demás caminan. Bueno… ¿y hasta cuándo?  Hasta que dejas de caminar o de mirar. Pero… ¿entonces qué gracia tiene el vivir? ¿Para qué vivimos? Para disfrutar del camino.(Dialogo Zen)   ¿Como ser feliz? es una pregunta recurrente de muchos, aun cuando sabemos que no hay fórmula para alcanzar ese estado ideal con el que muchos sueñan o al que algunos no se permiten llegar, vagamos en la búsqueda de respuestas. Y es que en nuestro paso por la vida olvidamos disfrutar del paseo, a veces vamos tan rápido que es imposible detenernos en los detalles y en el disfrute de cada momento o de esas pequeñas cosas. Decía Immanuel Kant: “La felicidad; más que un deseo, alegría o elección, es un deber”. Ciertamente la felicidad ni siquiera es un derecho como tanto repetimos es una obligación. Si hacemos un ejercicio mental ...

Te miro y no me gusta lo que veo Donde está el brillo de tus ojos? Otra vez me doy la vuelta y te miro y no me gusta lo que veo, que son esas hebras de hilo blanco en tu cabello? y aquella cicatriz en el rostro, y tu sonrisa donde quedo tu sonrisa? Te miro y solo hago preguntas sin respuestas. Por eso ya no te miro paso a tu lado y te ignoro, prefiero imaginar que no estás, a veces te odio, ¿cómo dejaste que muriera ese reflejo de tu alma encantada, tranquila, serena como las aguas de mi río en primavera? A veces pienso en deshacerme de ti y me arrepiento,  me pregunto, ¿y si lo hago? ¿quién te recordará lo que fuiste?  ¿cómo recobraré la sonrisa si me enamoro de ti de nuevo?, fuiste mi aliado de mis años mozos y ahora ya no te quiero,  porque me recuerdas cada día al pasar a tu lado, que si no te ignoro seré víctima del tiempo  o de una comparación absurda,  o de una noche de desvelo, quizás vuelva amarte,  pero hoy te sigo igno...

“El objetivo de la vida es hacer que los latidos del corazón coincidan con los latidos del universo. Para que tu naturaleza coincida con la Naturaleza”. Joseph J Campbell Hoy no hablaremos de magia, ni de la imaginación de algún lunático, sino de aquellas señales enmascaradas, que no podemos ver claramente pero que nos trasmiten un mensaje que debemos descifrar, son las llamadas señales del universo. Para muchos materialistas es un tema de más, porque todo tiene una explicación desde la realidad objetiva que se refleja en la conciencia del hombre. Pero ¿qué hay con esas señales? coincidencias, sincronías para las que a veces no encontramos explicación. Me gusta mucho la idea de pensar en las señales del universo, aprender a escucharlas, descifrarlas, y estar en sintonía con ellas. Ayer estaba sentada frente a la computadora, hablaba por teléfono, y escribía un artículo sobre felicidad que estaba dándome que hacer por una semana, son las cosas que escribo a las que cata...

“ Nunca sientas que tus mejores días han quedado atrás. La reinvención es la forma más pura de esperanza. Haz que hoy sea lo mejor posible”. Phil Wohl.   Y un día Ella se descubrió convertida en todo lo que tanto odiaba, en todo por lo que luchó no ser, y ahí estaba atrapada sin salida, sus miedos eran ahora una realidad palpable, tan suya como cada parte de su cuerpo que le acompañaba a cada sitio sin permiso, involuntariamente. Y ahí está Ella, sentada frente a su sombra cuestionado su existencia. ¿Será que equivocaste el camino? o corriste detrás del amor equivoco, malsano, no correspondido, ese que duele, o quizás en algún momento perdonaste de más por entender demasiado a los que no te merecen. Cada día era la certeza de un mañana sin cambios de un inmovilismo enfermizo, pero no ciego, todo era tan claro y evidente ante sus ojos que podía dibujar cada uno de sus miedos. Ahí estaba Ella, rodeada de lo que construyó, pero solo rodeada, no caminaba con nadie de la ma...