Juzgar duele

No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros. Mateos 7:2 

Los juicios sobre los demás parecen ser constantes, es como si estuviéramos programados para emitir
criterios y valoraciones de las conductas, actitudes, apariencias, en fin de la vida de los otros, pero también sentimos que somos juzgados por nuestros actos. Cabría preguntarse: ¿Cuánto tiempo de nuestras vidas dedicamos a emitir juicios o valoraciones a veces apresuradas sobre los otros?

Juzgar me parece un acto fácil, decir le vi, estaba allá con apariencia bohemia, llevaba aretes, tattoo, pelo al descuido, no me gusto lo que dijo, su sonrisa era fingida, o esta persona parece esto o aquello, no deja de mirarme de esta u otra manera, no parece inteligente, es un mal padre o es un mal hombre o una mujer ligera o es estúpido, ejemplos miles, y es que invertimos mucho tiempo juzgando a los demás y con esa misma intensidad somos juzgados, a pesar del daño que nos hace o del daño que hacemos a los otros.
William James dijo: “el principio más profundo del carácter humano es el anhelo de ser apreciado” y ciertamente comenzamos desde muy pequeños a buscar aceptación de los demás, entonces imaginen el daño que nos hacen los juicios apresurados y las etiquetas.
Hemos sido educados en una cultura de la prisa en la cual hay poco tiempo para todo, todo se hace rápido no hay tiempo para reflexionar y con esa rapidez emitimos los juicios sobre los otros, sin darnos cuenta que les dañamos, si pensáramos solo un poco en por qué juzgamos lo haríamos menos y nos enfocaríamos más en nuestras propias limitaciones.
Cuando juzgamos estamos tratando de que los demás vean el mundo como lo vemos nosotros, desde nuestra perspectiva de lo que está bien o mal y no damos oportunidad a valorar otras maneras de entender el mundo. Mantener la mente abierta a otras visiones, creencias, maneras de actuar nos ayudará a no crear juicios apresurados y equívocos de los demás.
Juzgar duele, cuando lo hacemos dañamos al otro y también a nosotros mismos, a veces nos sentimos liberados al hacerlo, pero es una sensación temporal luego viene la culpa. A veces lo hacemos porque somos incapaces de entender la realidad ajena, de tomarla en cuenta como algo enriquecedor, si en vez de juzgar valoramos, sería más fácil entendernos y demostrar a las personas que lo que nos importa es ella, no lo que hace.
La Neurocientífica Rebeca Saxe del instituto de Massachusetts, encontró que existe un área específica en el cerebro que se activa cuando tratamos de entender cómo y por qué los otros actúan como actúan. Es decir, se demostró que estamos condicionados biológicamente.
Hace unos días vi una entrevista de Trevor Noah a Zozibini Tunzi (Miss Universo 2019) muchos habrán leído los titulares y noticias respecto al triunfo de la concursante de Sudáfrica porque no faltaron los juicios equívocos con respecto a ella y su imagen. Intencionalmente Trevor le pregunta por qué llevó su pelo de eso modo es decir, afro, corto, si pudo haberse puesto una peluca y ella sonriente solo contestó algo más o menos así: "Porque es mi pelo, esta soy yo". Del mismo modo lo hizo en el certamen, su discurso de respuesta a los que crean juicios discriminatorios de las personas decía:“Crecí en un mundo en el que una mujer como yo, con mi tipo de piel y mi tipo de cabello, nunca fue considerada hermosa, y creo que es hora de que esto termine hoy. Quiero que los niños me miren y vean mi cara y quiero que vean sus propias caras reflejadas en la mía”.
Y es que cuántas veces hemos sido juzgados, y cuánto nos molesta o nos duele, esta es una razón para dejar de hacerlo. Muy de moda esta el Mindfulness es una técnica basada en el budismo, su filosofía tiene como base “no juzgar a los demás ni a uno mismo", demostrando que el hecho de no juzgar afecta de manera positiva el bienestar de la persona.
Practiquemos no juzgar y ser compasivos, tratemos de entender al otro, ser tolerantes y comprender por qué las personas actúan de un modo que no entendemos, cada un@ tiene su propia historia. Liberarnos de realizar juicios constantes y a veces equívocos de los demás nos ayudará a amarnos y entendernos.

Comentarios

  1. Genial este artículo. Gracias ��.

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  2. Muy acertado "Juzgar duele" como cada una de tus reflexiones. Creo que nos corresponde ser empáticos y asertivos, y de cierto modo hacer nuestros el tema "Remamos" de Kany García, donde habla de "desamprender" todas aquellas costumbres,patrones,pensamientos y actuaciones q obviamente frenan y ponen fronteras, límites a nuestro crecimiento personal. Una vez más gracias por tus alas. Feliz 2020

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  3. Excelente����
    Bendecido año 2020����

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